Por: Redacción Top News

Entre enero y octubre del presente año, los establecimientos del Ministerio de Salud (Minsa) atendieron 10,908 casos de niñas, niños y adolescentes (NNA) víctimas de abuso sexual. Esta alarmante cifra subraya la urgencia de combatir la violencia sexual, un problema que afecta profundamente a la salud mental y el bienestar de las víctimas y sus familias. 

En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el Minsa iluminó el frontis de su sede institucional como parte de la campaña “Prevenir para proteger”, liderada por el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables. Esta iniciativa busca sensibilizar y fortalecer la lucha contra la violencia sexual hacia menores de edad. 

Recursos y atención en salud mental

La directora de Salud Mental del Minsa, July Caballero Peralta, destacó que el país cuenta con 286 Centros de Salud Mental Comunitaria (CSMC), enfocados en la prevención y el tratamiento de problemas de salud mental en la infancia y adolescencia, incluyendo a víctimas de abuso sexual. 

Además, informó que se dispone de 2,426 profesionales de psicología en el primer nivel de atención no especializado a nivel nacional. A esto se suman 34 hospitales con Módulos de Atención al Maltrato Infantil y del Adolescente (MAMIS), 49 unidades de hospitalización en salud mental y adicciones, y 12 equipos itinerantes que llegan a poblaciones en situación de vulnerabilidad, como aquellas en zonas distantes o en situación de calle. 

“Los efectos de la violencia sexual no solo impactan a las víctimas directas, sino también a sus familias y comunidades. Este tipo de violencia altera profundamente el desarrollo personal y cotidiano de las víctimas en sus hogares, colegios y demás espacios de interacción social”, afirmó Caballero Peralta.