

Por: Redacción Top News
El descubrimiento, realizado en un yacimiento cercano a General Roca, provincia de Río Negro, generó entusiasmo entre los paleontólogos y miles de espectadores que seguían la transmisión. El hallazgo forma parte de la Expedición Cretácica I, liderada por el CONICET en colaboración con la Fundación Azara y la National Geographic Society, cuyo objetivo es recuperar restos fósiles inéditos de dinosaurios carnívoros para la ciencia.
Durante una recorrida por la estepa patagónica, los investigadores identificaron un nido que a simple vista parecía común. Sin embargo, tras un análisis detallado, hallaron un huevo en un estado de conservación excepcional.
“Nunca vimos algo así, nunca vimos un huevo tan bien preservado. Esto es de un dinosaurio carnívoro, muy parecido al Bonapartenykus”, expresó uno de los paleontólogos en la transmisión, mientras el equipo celebraba el hallazgo.
Inicialmente se pensó que se trataba de un huevo de ñandú, pero la ornamentación y textura rocosa confirmaron su origen prehistórico. El momento fue registrado y rápidamente se viralizó en redes sociales, captando la atención de miles de usuarios.
El huevo, atribuido a un dinosaurio carnívoro similar al Bonapartenykus, destaca por su integridad y calidad de preservación. Según los especialistas, presenta características externas similares a las de las aves actuales, aunque conserva rasgos típicos de los dinosaurios. Este hallazgo se suma a otros descubrimientos realizados en el mismo sitio, donde previamente se recuperó la garra de un Bonapartenykus ultimus.
La importancia científica de este descubrimiento radica en su potencial para aportar información inédita sobre la reproducción, desarrollo y diversidad de los dinosaurios carnívoros que habitaron la Patagonia hace unos 70 millones de años.
Matías Motta, integrante del equipo, explicó: “Nuestro objetivo sería recuperar piezas clave no solo de uno, sino de dos dinosaurios carnívoros de los que en años anteriores encontramos garras y huesos de la cola. Queremos conocerlos más, ver si son especies nuevas y entender qué rol tuvieron dentro de este ecosistema”, según declaraciones recogidas por Infobae.
El yacimiento, con una antigüedad estimada de 70 millones de años, ha revelado al menos diez especies animales aún no descritas formalmente. Las excavaciones se realizan con técnicas de alta precisión y herramientas manuales, además de registrar cada paso del proceso mediante transmisiones en vivo con conexión satelital.
La campaña, desarrollada del 1 al 10 de octubre, se transmite diariamente por el canal de YouTube y redes sociales del Laboratorio de Anatomía Comparada y Evolución de los Vertebrados (LACEV). Esta iniciativa permite al público interactuar en tiempo real con los científicos, realizar preguntas y participar en talleres virtuales.
Federico Agnolín, jefe científico del LACEV-MACN-CONICET, destacó: “La ciencia puede llegar a mucha gente que antes no llegábamos”. Con este formato, la expedición busca democratizar el acceso al conocimiento y fomentar el interés por la ciencia en estudiantes, docentes y familias.
La Expedición Cretácica I se consolida así como un modelo innovador de divulgación científica en Argentina, combinando investigación de alto nivel con participación ciudadana. Gracias a su impacto educativo y social, la Patagonia reafirma su posición como uno de los epicentros mundiales de la paleontología.